CSTDOSPUNTS Nº 9 ABRIL 2021

CAP Sant LLàtzer Mi tarea era vía telefónica: consistía en la atención al paciente para la gestión de bajas, actualización de recetas, derivación a urgencias del CAP o resolución de patologías agudas no graves. Para ello no estaba solo, si necesitaba ayuda mis compañeros me la ofrecían, me formaban, compartían sus experiencias, se convertían en amigos. Me acuerdo de mi primera paciente. Consultaba por dolor crónico agudizado, la atendí vía telefónica pero aun así pude entender la situación por la que estaba pasando, tanto ella como su familia. Necesitaba no sólo que se le tratara el dolor físico, si no también que alguien empatizase con ella, que pudiera meterse en su barco y que le ayudara a remar. Aquel día, esa paciente llegó conmigo a casa, en mis pensamientos. Empecé a estudiar. ¿Cómo podía ayudar? Mi mente había cambiado de parecer: ya no pensaba en dedicarme a la cirugía o a otra especialidad, sin saberlo mi vocación era ser médico de familia. Mis compañeros del CAP me ayudaron a tomar la decisión, y fue así como, llegado julio, fui a Madrid y escogí especialidad en el Ministerio de Sanidad. Siempre estaré agradecido de haber tenido la oportunidad de colaborar en esta situación tan única que hemos vivido y seguimos afrontando hoy en día. Me cambió la vida. Hoy es mi primer día post-guardia, mi primera guardia como residente en el Consorcio Sanitario de Terrassa. ¿Mi especialidad? Medicina Familiar y Comunitaria. 7

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