El pasado 14 de noviembre se celebró el Día Mundial de la Diabetes, una jornada para concienciar sobre esta enfermedad. Hoy le explicamos qué es la diabetes gestacional, una complicación común durante el embarazo que afecta hasta el 10% de las gestaciones.

La diabetes gestacional es una alteración en la intolerancia a la glucosa, que se manifiesta con niveles elevados de glucosa en sangre. Se detecta por primera vez durante el segundo o tercer trimestre del embarazo, puesto que no existía antes de la gestación.

Durante el embarazo se producen cambios metabólicos importantes que pueden provocar resistencia a la insulina. Esto se debe, principalmente, a la secreción de hormonas por parte de la placenta que elevan los niveles de glucosa en sangre, requiriendo mayor actividad de la insulina.

La diabetes gestacional se desarrolla en aquellas mujeres cuya función pancreática es insuficiente para normalizar los niveles de glucosa durante el embarazo.

Esta alteración metabólica puede tener consecuencias tanto a nivel materno como fetal:

  • En el feto los niveles altos de glucosa de forma mantenida aumentan la producción de insulina, lo que puede generar mayor crecimiento fetal (macrosomía).
  • La hiperglicemia en el feto también condiciona un aumento de sus diuresis, pudiendo provocar un exceso de líquido amniótico (polihidramnios).
  • Los niveles de glucosa descontrolados provocan un aumento de las necesidades metabólicas en el feto, haciendo que éste sea más sensible a diferentes situaciones de estrés, por lo que aumenta la morbimortalidad fetal y neonatal.
  • En cuanto a la madre, el hecho de sufrir diabetes en el embarazo aumenta el riesgo de desarrollar diabetes mellitus tipo 2 a medio/largo plazo.

Gran parte de estas consecuencias pueden minimizarse con un control metabólico adecuado, es decir, con diversas medidas que permitan mantener los niveles de glucosa en un rango aceptable.

Por eso los dos pilares básicos del tratamiento son la dieta y el ejercicio físico.

En los casos de difícil control, también se indicará el tratamiento con insulina.

El embarazo supone una situación metabólica estresante. Es esencial realizar un seguimiento adecuado durante el embarazo para detectar y controlar la diabetes gestacional, garantizando así la salud de la madre y el bebé.