La mutilación genital femenina incluye un conjunto de procedimientos con alteración, lesión y/o extirpación por parte de los genitales femeninos sin motivo médico.
Es una práctica que vulnera los derechos humanos de las niñas y mujeres
Según datos de UNICEF, alrededor de 200 millones de niñas y mujeres han sufrido mutilaciones genitales en el mundo.
Se practica tradicionalmente en países de África, Oriente Medio, Asia y algunas comunidades de Latinoamérica, pero los movimientos migratorios hacen que esté presente en cualquier parte del planeta.
Puede producir problemas al orinar, dolor, sangrado, infecciones, e incluso la muerte. Además, tiene otros efectos negativos sobre la sexualidad, la reproducción y la salud mental.
Por eso: si crees que alguien está en riesgo, si sospechas que fuiste mutilada o si tienes problemas relacionados con una mutilación genital femenina, puedes pedir cita en ASSIR o con el servicio de pediatría.
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