Día Mundial de la Endometriosis

El Consorci Sanitari de Terrassa se adhiere al Día Mundial de la Endometriosis

La endometriosis es una enfermedad crónica, inflamatoria y hormodependiente de origen ginecológico que afecta aproximadamente a 180 millones de mujeres en todo el mundo, siendo más frecuente que el asma, el sida, la epilepsia y la diabetes juntas.

La base de la enfermedad, es compleja, a grandes rasgos consiste en la existencia de tejido endometrial fuera del útero, normalmente en genitales internos femeninos y la pelvis, aunque en algunos casos también podemos encontrarlos fuera de ella. El sistema inmune no es capaz de eliminar estos implantes endometriales, causando dolor, inflamación y fibrosis.

Hoy en día ya sabemos que la endometriosis debuta en la adolescencia con mayor frecuencia de lo que pensábamos hasta ahora. Así pues, hasta dos tercios de las mujeres afectas empezarán a presentar síntomas antes de los 20 años.

Además, aproximadamente el 80% de las adolescentes con dolor pélvico crónico y/o dismenorrea que no responde a la terapia médica convencional (analgésicos +/- terapia hormonal) tienen endometriosis.

La endometriosis en la adolescencia puede ser un reto diagnóstico. Los síntomas más frecuentes en esta etapa además de la dismenorrea (dolor de regla) y los sangrados menstruales abundantes, son los dolores de cabeza, los mareos y la lumbalgia.

La exploración física puede presentar ciertas limitaciones puesto que muchas adolescentes pueden no ser sexualmente activas sumado a la dificultad para el diagnóstico de la endometriosis en estadios precoces (la endometriosis superficial es la más común en esta etapa).

Posiblemente la ecografía ginecológica y/o la resonancia magnética sean normales, sin que ello pueda descartar el diagnóstico.

Por último, hay que tener en cuenta, la afectación psicoafectiva y social que representa esta enfermedad también en la adolescencia, etapa de máxima vulnerabilidad en general.

Que la regla afecte a tu día a día no es normal . Si es tu caso es necesario buscar el porqué.

No dejes de consultarlo con algún profesional del ASSIR o de la consulta ginecológica infanto/juvenil.